Comenzar a bailar durante la infancia es una excelente forma para que nuestros hijos entren en contacto con su cuerpo, la música y el arte, el ballet es una actividad que necesita de mucho tiempo, dedicación, constancia y concentración, es muy recomendado que se comience a practicar a temprana edad ya que su proceso de aprendizaje es mas rápido.
Esta danza es la preferida de muchos de nuestros pequeños, ademas de que aporta grades beneficios física y psicológicamente durante su práctica, es por eso que aquí te compartiremos algunos de ellos:
Mejora su postura y fortalece sus músculos:
Esta danza ayuda a corregir y fortalecer los músculos de la espalda y columna de tu pequeño ya que tiene como base distintos estiramientos y posturas que con el tiempo lo ayudan a mejorar y evitar las desviaciones, además de que también favorecen a la circulación y fuerza de sus piernas, caderas y tobillos.
Aprende a conocer y coordinar mejor su cuerpo:
Ya que necesitan utilizar muchos músculos y partes de su cuerpo, con el tiempo se dan cuenta de cómo funcionan y la capacidad que tienen con cada uno de ellos, ademas también favorecen a su coordinación y fuerza pues en cada paso necesitan tener una excelente armonía con su cuerpo.
Estimula su creatividad y sensibilidad:
El baile es una forma de expresarse y de dejar fluir sentimientos y emociones de una forma sana, además de que los ayuda a descargar y liberarse de su estrés y ansiedad, también los motiva a desarrollar su personalidad y a explorar su mente, ya que con cada baile son capaces de contar a una historia distinta.
Nuestros hijos además de disfrutar del ballet también se benefician con todas las ventajas que esta danza les aporta para su desarrollo y el resto de su vida.
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